Especies como el oso pardo, los
alcornoques y la Dehesa extremeña podrían desaparecer de la Península Ibérica
si continúa produciéndose el deshielo y la explotación petrolífera en la región
polar. Es una de las conclusiones del informe El
Ártico y los efectos del cambio climático en España presentado por
Greenpeace, que alerta de "graves alteraciones climáticas que afectan a
todo el mundo, también a España".
Efectos
del deshielo en España
En el informe, que se ha presentado
en rueda de prensa, la organización ecologista apunta que podrían desaparecer
las zonas adecuadas para el alcornoque en el suroeste de España,
por lo que esta especie podría desaparecer a mediados de este siglo en
Extremadura, Andalucía y Cataluña, mientras que las nuevas áreas potenciales
serán Galicia y el oeste de Asturias.
Además, la influencia en la biología y en la distribución de las especies del cambio climático podría favorecer la expansión de plagas, como la procesionaria o de especies invasoras como las medusas en el Mediterráneo o el mejillón cebra, lo que distorsionará la habilidad competitiva de las especies y se modificaría la estructura y el funcionamiento de los ecosistemas.
Además, la influencia en la biología y en la distribución de las especies del cambio climático podría favorecer la expansión de plagas, como la procesionaria o de especies invasoras como las medusas en el Mediterráneo o el mejillón cebra, lo que distorsionará la habilidad competitiva de las especies y se modificaría la estructura y el funcionamiento de los ecosistemas.
Al mismo tiempo, el documento refleja
los impactos
en algunos sectores económicos, como la agricultura o la
ganadería a causa del déficit de agua. Así, notarían los efectos del cambio
climático sectores concretos como el vinícola -por mayores riesgos de heladas
y menores períodos de maduración-, el turismo
de interior -por
olas de calor, incendios forestales- o el turismo de nieve -por la regresión de los glaciares del
Pirnieo, que ha sido del 40% en la última década-.
Asimismo, también prevé un aumento de
la propagación de enfermedades infecciosas a través de mosquitos:
mosquito tigre -encefalitis- o el mosquito anófeles, transmisor de la malaria
que, pese a que la enfermedad no es endémica en España, podría darse en el
delta del Ebro. Según un estudio científico al que ha hecho referencia
Greenpeace, esa zona presenta las características ecológicas favorables para la
introducción de la malaria.
Una de las responsables de Greenpeace, Pilar Marcos, ha
explicado que los efectos del cambio climático preocupan en función del lugar
de residencia, aunque ha precisado que "nunca 5.000 kilómetros -la
distancia que hay entre el Ártico y España- estuvieron tan cerca. "El
Ártico no es de nadie y debe ser patrimonio de la Humanidad", ha
sentenciado.
Nueva
campaña de Greenpeace
Por otra parte, la ONG pone en marcha
la campaña Salvar el
Ártico es salvar mucho más, en la que se muestran los efectos del
cambio climático en España pese a que el Ártico esté a 5.000 kilómetros de
distancia.
A la campaña se han sumado personajes
como Alejandro
Sanz, Juan Ramón Lucas, El Gran Wyoming, Thais Villas, Coque
Malla, Sergio
Peris-Mencheta, Gonzo, Dani Mateo, Rebeca Jiménez y Nicolás
Coronado. Explicarán fenómenos que podrían producirse como la subida del nivel del mar, la
pérdida de biodiversidad, el aumento de temperaturas y los fenómenos meteorológicos extremos.
Greenpeace pretende, en el marco de esta campaña, formar
una gran cadena humana virtual alrededor del Ártico y pedir que la Asamblea General
de las Naciones Unidas, que se celebrará el próximo mes de septiembre, las
aguas internacionales del Ártico se declaren espacio protegido, con la
prohibición de actividades de explotación petrlífera y pesca industrial.
Esta campaña es una continuación de
una acción anterior que llevaron a cabo y por la que la organización recogió 2,5
millones de firmas para
solicitar esa declaración del Ártico como un santuario protegido.
Durante la presentación de la campaña
internacional, surgida a iniciativa de Greenpeace España, el director ejecutivo
de la ONG, Mario Rodríguez, ha manifestado que la próxima crisis no será financiera sino climática y centrada en el modelo energético.
Además, a su juicio es
"indecente e inmoral" que sean las empresas petroleras y gasísticas
las que se quieran aprovechar de los recursos del Ártico que quedan al
descubierto a raíz del deshielo provocado por el cambio climático que ellas
mismas están provocando.
Recordemos que recientemente la empresa Shell anunció que pausaba durante 2013 su programa de perforación en Alaska, aunque tiene previsto continuarlo en un futuro.
Recordemos que recientemente la empresa Shell anunció que pausaba durante 2013 su programa de perforación en Alaska, aunque tiene previsto continuarlo en un futuro.
Para colaborar con la campaña se
puede enviar un SMS al 28099 con el texto 'Ayuda al ártico'. Con ello, se
recibe una geolocalización que se puede introducir en la web
de la campaña para
formar una cadena humana virtual. "Hay que simbolizar que parte de la
población no quiere prospecciones en el Ártico", ha añadido Pilar Marcos.